Los perros pueden comer pollo? Descúbralo con Barkyn
Seguro que tu perro se vuelve loco por un trozo de pechuga de pollo. Descubre si los perros pueden comer pollo en el artículo de hoy.
Irene Martínez
VeterinariaLos perros son carnívoros facultativos, por tanto los perros pueden comer pollo y todo tipo de piensos de proteína animal, sin problema…en principio.
Los perros se alimentan principalmente de proteína de origen animal, por tanto no hay duda de que los perros pueden comer pollo, ternera, cerdo y todo tipo de carne.
No hay dudas de que el pollo es un excelente alimento para ellos, pero hay que saber que esto puede depender de la parte del pollo y de cómo este o no cocinado.
¿Los perros pueden comer pollo?
Los perros son carnívoros y obviamente la carne de pollo puede formar parte de su alimentación sin ningún riesgo. Muchas personas alimentan a sus perros con pollo ya que es una fuente de proteína de alto valor biológico, baja en grasa y económica.
El riesgo de alimentar con pollo radica básicamente es la parte del pollo que le damos y cómo se cocina. Los huesos de pollo cocinados se astillan y pueden provocar úlceras digestivas y daño intestinal. Por otra parte, si se da el pollo crudo y mal conservado puede haber intoxicación alimentaria, por ejemplo en el caso de dar dieta BARF.
Beneficios de la carne de pollo para tu perro
El perro puede comer cualquier parte del pollo, siempre que no contengan huesos cocinados.
- La carne de pollo, ya sea de la pechuga o los muslos, es una perfecta fuente de proteína, además baja en grasa. Es una perfecta opción para perros que estén siguiendo una alimentación light, siempre y cuando se retire la piel del pollo.
- Por otro lado, la piel del pollo es demasiado grasa, lo ideal es dar la pieza de carne sin la piel.
- En cuanto a los huesos, se recomienda dar los de la zona de la carcasa, ya que son blandos y carnosos, pero siempre en crudo.
- Por último, las vísceras del pollo (hígado, corazón y riñones) son ricas en vitaminas B, A y K, pero también ricas en hierro y zinc.
Aunque se deben dar con moderación, porque el exceso es perjudicial.
Los órganos digestivos se deben evitar ya que es una fuente de contaminación, aunque los pollos que se venden en los supermercados ya están limpios y no contienen intestinos.
Riesgos de dar pollo a tu perro
Como hemos dicho, el riesgo de dar pollo radica sobre todo en qué parte del pollo le damos y el estado de esta carne.
- Huesos: los huesos cocinados pueden astillarse y provocar problemas digestivos (úlceras, vómitos, diarrea, estreñimiento…).
- Intoxicación: el pollo crudo está lleno de microorganismos que pueden ser perjudiciales para nuestros peludos, como la Salmonella o Campilobacter. Este riesgo se reduce mucho si congelamos la pieza durante unos días o cocinamos la carne.
- Exceso de vísceras: el consumo excesivo de vísceras puede provocar problemas de salud a nuestro perro.
- Alergia alimentaria: algunos perros son alérgico a esta proteína ya que es una de las más usadas en los piensos comerciales. Pueden aparecer síntomas digestivos o dérmicos.
La forma correcta de darle pollo a tu perro
La mejor forma de dar pollo a tu perro es apartar una ración de pollo, sin grasa y huesos, para él y cocinarla aparte.
De esta forma evitaremos el exceso de sal y tampoco le daremos otros condimentos (especias, ajo, cebolla, etc).
Hervirlo es la forma más sencilla de cocinar el pollo para el perro, simplemente de esta forma le va a resultar un manjar.
Además de cocinar pollo, ahora en el mercado a un montón de snacks y chuches naturales 100% pollo, como:
- Pechugas de pollo deshidratadas.
- Carne de pollo liofilizadas.
- Cuellos de pollo, patas, higaditos e incluso mollejas desecados.
- Comida húmeda o cocinada comercial de pollo.
Alimentar a los perros con pollo: recomendación veterinaria
Nuestra recomendación es cocinar el pollo, ya sea hervido o a la plancha (con poco aceite), siempre eliminando cualquier hueso.
Se puede añadir un poco de carne de pollo al propio pienso, para que le resulte más apetitoso.
Si elegimos esta opción hay que tener en cuenta que no deberá superar el 10% de la ración de pienso.
En perros que puedan tener alergia a este tipo de proteína el pollo debe eliminarse totalmente de la dieta, incluido cualquier chuche o snack con este ingrediente.
Irene Martínez – Médica Veterinaria