Conoce 6 olores que no les gustan a los perros

El olfato del perro, su gran sentido

Todos sabemos que el olfato es el sentido mas desarrollado de los perros, por eso los humanos aprovechamos esa agudeza olfativa para ayudar en diversas labores, como por ejemplo perros de rescate, rastreadores de drogas, perros de búsqueda…

El secreto de esta gran potencia de olfato reside, como no podía ser de otro modo, en su hocico. Los perros cuentan con una superficie olfativa en torno a 20 veces más grandes que el ser humano. Esta superficie está recubierta de entre 200 y 300 millones de receptores olfativos, depende de la especie.

Por si fuera poco, los perros disponen de en torno a 15 veces mas de cilios olfativos por cada célula olfatoria. Estas estructuras se encargan de recibir y procesar las sustancias odoríferas. Con todo este armamento, os podéis hacer una idea del gran potencial que tiene el olfato de nuestros perros. Son capaces de reconocer olores que nosotros ni imaginamos.

Por este motivo, la intensidad de ciertos aromas que a nosotros nos pueden resultar agradables o, al menos, no molestos, a ellos les puede suponer un auténtico bombazo olfativo.

• El alcohol

Es una sustancia del todo desagradable, además de irritante por la volatilidad del compuesto. Todos los alcoholes son desagradables para los perros. Pero cuanto mayor sea el grado de alcohol, mayor será el desagrado producido. Por ejemplo, una botella de alcohol etílico para las heridas será mucho más molesto que una el olor de una bebida alcohólica.

No obstante, dada la potencia olfativa del animal, cualquier liquido con base alcohólica va a resultar incómodo.

Como curiosidad, una prueba para evaluar la respuesta neurológica de los nervios del perro, se basa en medir la respuesta ante un estimulo olfativo a base de alcohol.

• Las colonias y olores perfumados

En la línea del ejemplo anterior, los compuestos aromáticos con base alcohólica van a ser poco tolerados por nuestros perros. Además, a esta circunstancia hay que añadir que las colonias se utilizan para enmascarar los olores propios de cada individuo.

A los perros les gusta oler a perro. Por este motivo, es frecuente que los perros se revuelquen tras el baño con la intención de eliminar ese olor del todo artificial para ellos.

• Olores cítricos, como el vinagre o el limón.

Si estos olores ya resultan difíciles para nosotros, que somos unos negados a nivel olfativo, podéis imaginar lo desagradables que son para los perros.

Estos olores, además de resultar molestos, pueden causar irritación a nivel olfativo y ocular. Por esta razón, debemos de tener cuidado de mantener lejos de alcance de los perros este tipo de productos, así como otras frutas cítricas, como la naranja o el pomelo.

• Olores picantes

Compuestos como guindillas o tabasco, producen unos olores insoportables para nuestros perros. Como en los anteriores, pueden producir irritación en las vías respiratorias superiores del animal.

• Productos de limpieza

Los perros no son fans de la limpieza. A ellos les gustan las cosas sucias y con su propio olor. El amoniaco, la lejía o los detergentes, pueden causar irritación en nuestros perros. Razón por la cual, hay que extremar las precauciones a la hora de limpiar en presencia de nuestras mascotas para evitar posibles complicaciones.

• Barnices

Este tipo de productos, como era de esperar, cuentan con sustancias volátiles aceitosas y resinosas. En casos de inhalación prolongada, se puede producir irritación en las vías respiratorias y en los ojos.

 

Juan Vázquez

Médico veterinario