Juguetes no recomendables para perros
A los perros le encanta jugar y, si es con un juguete nuevo, aun mejor. Pueden tener un millón de juguetes, pero siempre el juguete nuevo va a ser que despierte su interés y es que, en ese aspecto, son como niños. Sin embargo, no todos los juguetes son adecuados para nuestro perro, además de depender del tamaño y mordida del animal. En este artículo vamos a mostrarte diferentes juguetes y cuáles no son indicados para ellos.
Irene Martínez
Veterinaria¿Qué juguetes no debemos darles?
A la mayoría de los perros les encantan los juguetes. Los juguetes que debemos evitar darles a nuestro peludo son cualquiera que no sea específico para perros ya que estos no están preparados para resistir la mordida de un perro y muchos se componen de piezas pequeñas que pueden tragarse y causarle obstrucción digestiva. Los juguetes a evitar son:
- Peluches y muñecos para niños: estos muñecos pueden llevar algún componente que sea tóxico para el perro si lo ingiere, cause heridas o pueda romper y tragarlo con facilidad. El relleno del peluche puede ser tragado y causar a nuestro perro graves consecuencias.
- Tiradores de cuerda: a muchos perros les encanta estirar y jugar con estos tiradores, además de ser divertido para ellos, fortalece su mandíbula y limpia su dentadura pero, cuidado, los hilos pueden desatarse y tragarlos con facilidad, causando obstrucciones digestivas. Si veis el mordedor en malas condiciones es mejor retirarlo.
- Fribees de plástico: a muchos perros les encanta cazar el frisbee pero, es recomendable elegir uno adecuado para perros y que no sea de plástico o materiales tóxicos, ya que puede causarles algún lesión en la boca.
- Pelotas de tenis: ningún perro se resiste a una pelota y, las de tenis, les encanta. Sin embargo, el material exterior de la pelota actúa como lija a morderlo y puede desgastar la dentadura de nuestro can.
Sea cual sea el juguete que elijamos para nuestro perro, debe ser adecuado para su tamaño para evitar que sea tragado o produzca lesiones en la boca. Por ejemplo, no tiene la misma fuerza ni tamaño de mandíbula un Boxer que un Podenco.
Irene Martinez
Médica Veterinaria