Viajar en avión con perros: cuidados y precauciones
Medios de transporte como los aviones cada vez ponen más facilidades para nuestros compañeros caninos puedan viajar con nosotros y no solo en bodega, como ocurría hasta hace poco, aunque no todas las aerolíneas tienen este servicio. El viaje en avión puede resultar estresante para el animal, por ello debemos tener algunas precauciones.
Irene Martínez
Veterinaria
Antes del vuelo
Antes de reservar el vuelo debemos informarnos bien de si la compañía aérea acepta animales, ya que hay casos en los que los admiten. También hay que tener en cuenta que, según el peso de nuestro perro, el animal podrá viajar en cabina con nosotros o tendrá que hacerlo en la bodega del avión.
Por normal general, la mayoría de compañías permiten viajar en cabina a perros de un máximo de 8 kg (con el peso del transportin incluido), así que la gran parte de perros deberán ir en bodega, con los riesgos que esto puede implicar, sobre todo para determinadas razas, como las braquicéfalas.
Es muy importante preparar al animal para el vuelo y acostumbrarlo a su transportin, que debe estar homologado. Es necesario que el animal esté en un correcto estado de salud, así que no hay que olvidar acudir a consulta para un chequeo previo.
Una vez en el avión es recomendable informar a la tripulación de que el perro está en bodega para intentar tenerlo controlado en todo momento.
Cuidados a tener en cuenta
Como he comentado, es muy importante el estado de salud del animal, muchas aereolíneas ya no permiten el vuelo a perros braquicéfalos, ya que son más sensibles a las temperaturas que pueden haber en bodega.
El transpotin debe ser uno homologado y podemos acomodarle el interior para que no sufra ningún daño durante el vuelo. Se recomienda que el animal esté en ayunas antes del vuelo para evitar que vomite o defeque durante el vuelo, pero siempre tendrá disponible agua fresca.
Se debe intentar no hacer uso de tranquilizantes durante el viaje, ya que muchos pueden bajar la temperatura del animal y puede ser peligroso al no tener al perro vigilado.
No se recomienda viajar en las épocas de más altas temperaturas ni en las más frías para evitar golpes de calor y congelación.
Irene Martinez
Médica Veterinaria