Tipos de antiparasitarios para perros

Antiparasitarios externos:

Los antiparasitarios para uso externo son principalmente compuestos químicos con acción insecticida y repelente que suelen aplicarse sobre la piel del animal y sirven para eliminar parásitos externos como pulgas y garrapatas. Desde hace unos años también existen antiparasitarios externos en forma de comprimido, que no tienen acción repelente pero eliminan al parásito cuando éste se alimenta del animal, ya que el compuesto está presente en la sangre. Los antiparasitarios externos más habituales son:

• Collares: estos antiparasitarios se colocan sobre el cuello del animal durante un tiempo determinado (según producto), liberándose el compuesto por la piel del perro de forma continúa. Existe muchos tipos en el mercado y suelen proteger contra pulgas y garrapatas principalmente, pero también existen algunos que tienen efecto repelente sobre mosquitos y flebotomos. Los más conocidos son Scalibor y Seresto.
• Pipetas (spot-on): se trata de ampollas con líquido en su interior que contiene el principio activo. Estas ampollas se aplican sobre la piel del animal, apartando el pelo. Hay diferentes tipos de pipeta dependen de los parásitos que eliminen: pulgas, garrapatas, mosquitos y flebotomos, piojos, ácaros, etc. Las pipetas más habituales son: Advantage (pulgas), Advocate (garrapatas, ácaros, etc), Advantix, Frontline…
• Spray: en este caso el antiparasitario se distribuye por el cuerpo del animal mediante difusión con el spray. Es un método muy eficaz, sobre todo si el perro está infestado ya y para cachorros muy jóvenes. Son eficaces contra pulgas y garrapatas principalmente. Aquí tenemos los sprays de Effipro y Frontline, entre otros.
• Champús: se utilizan durante el baño y tienen acción repelente, pero no muy
  útiles para prevenir infestaciones ni para eliminar el parásito.
• Diluciones: son productos antiparasitarios muy potentes que se diluyen con el agua y se aplican sobre el animal. Útiles en caso de grandes infestaciones. Si no se siguen las indicaciones del fabricante pueden provocar intoxicaciones (Barricade).
• Comprimidos: estos antiparasitarios son más novedosos. Se administran como pastilla, y el compuesto se metaboliza y pasa al torrente sanguíneo. Los parásitos, al alimentarse del animal, ingieren el producto y mueren. No evita la picadura de los parásitos, pero sí evita que se reproduzcan. Útiles en infestaciones por pulgas, garrapatas y ácaros, sobre todo si hay resistencias a otros antiparasitarios o alergias a insecticidas. La duración depende del fármaco: Bravecto (3 meses), Nexgard (1 mes), Simparica (5 semanas).

Antiparasitarios internos:

Los antiparasitarios internos se suelen administrar en forma de comprimido (aunque existen otros métodos). La desparasitación interna es muy importante en cachorros, así como una alimentación completa y de calidad. Según el principio activo utilizado pueden ser útiles para diferentes parásitos (cestodos, nematodos, filaria, etc). Se recomienda una desparasitación interna cada 3 meses para evitar reinfestaciones. Los tipos que podemos encontrar son:

• Comprimidos: se administran de forma oral. Según el compuesto que contengan eliminarán diferentes parásitos internos. Los más habituales son efectivos contra cestodos, tenias y diferentes gusanos intestinales. Los más conocidos son Zipyran y Milbemax, pero existen muchas marcas similares.
• Pipetas: se aplican sobre la piel del animal y eliminan algunos parásitos internos. No son útiles para todos los tipos de parásitos intestinales. La más conocida en perros es Advocate.

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Irene Martínez

Médica Veterinaria