Dipylidium caninum: El parásito interno más frecuente en perros
Los parásitos intestinales es la causa más frecuente de problemas intestinales en el perro, siendo las tenias como Dipylidium caninum la más común y, además, causa de zoonosis en las personas también.
Irene Martínez
Veterinaria¿Qué es el Dipylidium caninum?
Este parásito es un cestodo o gusano plano de 50 cm en su etapa adulta, que se aloja en el intestino delgado de animales como el perro y el gato, actuando estos de hospedadores, donde el parásito completa su ciclo y llega a la etapa adulta.
¿Cómo se transmite?
El cuerpo del cestodo está dividido en varios segmentos planos (proglotis) llenos de huevos en su interior. Estos segmentos se expulsan al exterior a través de las heces del animal. Una vez en el medio ambiente, los huevos son ingeridos por pulgas y piojos que luego infestan al perro o gato, que ingiere alguno de ellos al rascarse con la boca y vuelve a comenzar el ciclo.
Normalmente, lo que vemos son partes de este gusano (las proglotis), que se asemejan a granos de arroz y podemos verlas en las heces o alrededor del ano del animal. Si nos fijamos en esos “granos de arroz” veremos que tienen un leve movimiento.
¿Qué síntomas provoca?
En la mayoría de casos el animal se muestra asintomático pero, en caso de infestaciones graves podemos observar:
- Picor en la zona anal.
- Mal aspecto del pelaje.
- Pérdida de peso.
- Diarrea.
- Abdomen hinchado.
Diagnóstico y tratamiento
El diagnóstico suele ser sencillo, ya que en la mayoría de casos se pueden ver esos trozos del parásito alrededor del ano o el pelo del animal, en las heces o en su cama, además de presentar picor en la zona anal.
El tratamiento más utilizado para eliminar este parásito es el praziquantel, antiparasitario frecuente en la mayoría de pastillas desparasitantes. Normalmente se da una toma y se repite a los 15 días por si queda algún parásito. Importante desparasitar externamente también.
¿Cómo evitarlo?
El Dipylidium caninum está estrechamente relacionado con infestaciones de pulgas y piojos, por eso es muy importante desparasitar externamente a nuestra mascota, ya sea con pipeta o collar antiparásitos.
Se recomienda una desparasitación interna cada 3 meses de amplio espectro para eliminar posibles parásitos digestivos. Además, este parásito también puede afectar a personas en estrecho contacto con los animales, por lo que se trata de una zoonosis y afecta principalmente a niños.
Irene Martinez
Médica Veterinaria