Oftalmología veterinaria: conoce más sobre esta especialidad
Los ojos de los perros son fundamentales para que puedan ver correctamente, como no podía ser de otro modo. Si bien es cierto que no es uno de sus sentidos principales, como puede ser el olfato, mantener al perro con una buena salud ocular es imprescindible, tanto para su bienestar como para su funcionalidad. La […]
Juan Vazquéz
VeterinarioLos ojos de los perros son fundamentales para que puedan ver correctamente, como no podía ser de otro modo. Si bien es cierto que no es uno de sus sentidos principales, como puede ser el olfato, mantener al perro con una buena salud ocular es imprescindible, tanto para su bienestar como para su funcionalidad. La especialidad encargada de cuidar los ojos, es la oftalmología, y a continuación te explicamos más sobre ella.
Oftalmología veterinaria
La oftalmología veterinaria es la disciplina médica qué se encarga del estudio y cuidado de los ojos en todas las especies de animales.
Del mismo modo que sucede con la medicina humana, la carrera universitaria de veterinaria te otorga los conocimientos básicos para tratar todas las especies y todas sus posibles patologías. Por lo tanto, podemos decir que el veterinario generalista es un médico de cabecera, utilizando la analogía humana.
En este sentido, siempre que un animal presente cuadro patológico relacionado con los ojos, y el veterinario generalista considere que no tiene los conocimientos o los medios suficientes para poder diagnosticar y tratar correctamente, el profesional derivará el caso a un compañero oftalmólogo.
Diferencias entre veterinario generalista y veterinario oftalmólogo
La oftalmología veterinaria es una especialización propia de la profesión veterinaria, y como tal coma requiere la realización de estudios y/o prácticas, que capaciten al veterinario con los recursos necesarios para poder hacer frente a las patologías oculares más complejas e infrecuentes. En este sentido, incluso existen patologías que pueden relacionarse con intolerancia alimentaria o alergia a los componentes de algún pienso.
En este sentido, cabe destacar que los problemas oculares no son los más habituales en la clínica diaria. Por lo tanto, para poder especializarse, es necesaria la participación en másteres u otros estudios, y la realización de prácticas concretas.
Una vez que el veterinario oftalmólogo adquiera los conocimientos y las aptitudes prácticas, también necesita una serie de recursos materiales para poder llevar a cabo la realización de procedimientos concretos.
Una clínica generalista no suele disponer de estas herramientas materiales ya que suelen representar una alta inversión y pueden no ser rentabiliza durante la práctica diaria.
Por el contrario, un oftalmólogo veterinario, si bien puede tratar otras patologías, contará con un elevado volumen de consultas relacionadas con las patologías oculares. Por lo tanto, la equitación con estás recursos materiales concretos está justificada.
En conclusión, cómo habéis podido leer, los ojos de vuestros perros tienen profesionales veterinarios especializados a su disposición. Por lo tanto, si en algún momento creéis que necesitáis la opinión de un experto, no dudéis en acudir a un centro oftalmológico veterinario especializado.
Juan Vázquez
Médico veterinario