5 causas de las patas hinchadas en perros y su tratamiento

Hay varios motivos por los que pueden aparecer patas hinchadas en perros pero se necesita un buen diagnóstico para conocer la causa y poner un tratamiento adecuado.

5 causas de patas hinchadas en perros

Algunas de las causas de inflamación son leves, otras son un síntoma secundario a otra enfermedad, pero todas necesitan de control y tratamiento veterinario:

1. Fractura/fisura: la causa más frecuente de inflamación en una parte de la extremidad en un fractura y fisura ósea. Además de la propia lesión podemos observar cojera y mucho dolor. En casos de fracturas antiguas que ya han soldado se forma un callo óseo. Este callo aparece como un abultamiento pero ya no produce dolor. Si una fractura está bien unida ese callo no se llega a observar a simple vista casi.
2. Lesión articular: esta inflamación va a parecer en las zonas articulares de la extremidad. Por ejemplo, si se ve hinchada la pata trasera en la zona de rodilla, es muy posible que haya artritis ahí. Cuando hay artrosis o artritis también veremos una cojera pero, como en todas las lesiones articulares, según el animal se va moviendo, esta cojera será menor.
3. Absceso: también son frecuentes los abscesos en las patas. Se trata de una inflamación localizada donde hay infección (pus). Puede aparecer al clavarse algún objeto punzante (espigas) o por un mordisco. Además de la inflamación muy localizada, habrá síntomas como fiebre y dolor. Cuando el absceso se abre sale el pus retenido.
4. Edema: puede haber retención de líquidos también en las zonas más distales del cuerpo, como las extremidades. Esta causa no es nada buena, ya que puede aparecer de forma secundaria a otras enfermedades más graves. Por ejemplo, puede aparece edema en patas en caso de problemas en el corazón. También en enfermedades con pérdida de proteínas (leishmania, insuficiencia renal…).
5. Tumor: las neoplasias en extremidades que provocan inflamación localizada son las de hueso (osteosarcomas). Otros tumores que afectan a otras zonas pueden provocar edema en extremidades también y esta inflamación. El pronóstico del osteosarcoma no es favorable por desgracia.

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¿Cómo tratar la inflamación de patas de mi perro?

Como ocurre con todos los síntomas, el tratamiento va a depender del origen y causa de la lesión. Algunos tratamiento van a eliminar totalmente la inflamación, pero otros solo ayudarán a reducir los síntomas, por ejemplo:

• Fracturas/fisuras: el tratamiento se basa en resolver la fractura. En caso de una lesión reciente será necesario operar la extremidad y unir los huesos rotos. Si la fractura es leve o solo hay fisura, con inmovilizar la extremidad unas semanas es suficiente. También serán necesarios antiinflamatorios y analgésicos ya que es muy doloroso.
• Artrosis/artritis: la artrosis es una enfermedad articular degenerativa. Eso significa que va empeorando con el tiempo y es frecuente en perros ya mayores. Un pienso senior rico en antioxidantes y condroprotectores puede ayudar a mejorar la calidad de vida. La artritis, sin embargo, es la inflamación de la articulación, pero puede ser un problema puntual. Esta artritis puede aparecer por otras enfermedades, como Leishmania, pero también autoinmunes.
• Abscesos: en este caso el tratamiento es sencillo. Se debe abrir el absceso para eliminar toda la infección y tratar con antibiótico y antiinflamatorios.
• Edema: el tratamiento va a depender de la causa del edema. Si el origen es cardíaco el tratamiento se enfocará a trata ese problema de corazón. Si el edema se debe a una pérdida excesiva de proteínas, se debe conocer en por qué de esta hipoproteinemia (albúmina normalmente). Puede haber edema en enfermedades como leishmania, insuficiencia renal, enfermedades intestinales graves, tumores…
• Tumores: teniendo en cuenta que el osteosarcoma es el tumor que con mayor frecuencia afecta a extremidades, el tratamiento más efectivo es la amputación de la extremidad afectada y quimioterapia. Hay que tener en cuenta que este tumor es muy agresivo y puede causar metástasis rápido.

Irene Martínez

Médica Veterinaria