Pérdida apetito en perros, ¿ Una razón para preocuparse?

Llegamos a casa y nuestro peludo nos recibe saltando, moviendo el rabo de un lado a otro, con unas ganas tremendas de jugar. Vamos al salón a por su pelota y para nuestra sorpresa el comedero está lleno. ¿Nos alarmamos? No es necesario.

Muchos pueden ser los motivos no preocupantes que pueden hacer que nuestra mascota no se coma su ración de pienso. Tal vez haya ido a visitar a algún vecino y le haya dado unos macarrones que le sobraron y no tiene hambre de su pienso favorito. También puede ser que, si nuestro perro es una hembra y está en celo, pierda el apetito de forma natural. La naturaleza es muy sabia y la reproducción es lo principal, por lo que lo demás es secundario. También en la otra parte de la ecuación esto influye, ya que los machos, a pesar de no tener celo como la hembra, detectan el celo de estas como detecta mi hermana pequeña el chocolate que escondo en el armario. Y cuando un macho detecta una hembra en celo cerca, puede estar intranquilo y deseoso de ir a un aullar a su balcón. Y por supuesto, esto es más importante que comer.

En otras ocasiones, el perro puede ser caprichoso y cansarse de su pienso. En estos casos, puede ser aconsejable optar por un pienso personalizado de calidad. 

O sea, que como habéis leído, hay ciertas situaciones en las que podemos decir que es normal que nuestro perro haya perdido el apetito de forma puntual.  Pero, ¿ y cuando esta situación persiste en el tiempo?  ¿ y si además de perder apetito he notado otras cosas como diarrea o vómitos?  Entonces ya debemos de empezar a pensar que nuestro perro puede tener algún problema.

Si la pérdida de apetito se prolonga en el tiempo, nuestro perro empieza a adelgazar, presenta episodios de vómitos o diarrea,  debemos de consultar inmediatamente a un especialista que nos diagnostique acerca de lo que le pueda pasar a nuestro perro. Son muchas las patologías que cursan con pérdida de apetito. Algunas son poco importantes,  como puede ser un proceso catarral, una gastroenteritis,  enfermedades que causen incomodidad y desazón  tales como dermatitis, prurito, eccemas, gingivitis… Por el contrario existen otro tipo de enfermedades más graves que cursan con la misma pérdida de apetito. Estas van desde problemas hormonales,  a procesos tumorales,  pasando por cardiopatías, o enfermedades renales.

Por lo tanto, como hemos intentado explicar, aparte de las condiciones normales, son muchas y diversas las posibles patologías que causan la pérdida de apetito en nuestros perros. Por esta razón es fundamental no dejar pasar por alto este síntoma y siempre que sospechas de que algo raro pasa, contactar con un profesional para salir de dudas, y en caso de que esta pérdida de apetito sea consecuencia de una enfermedad, poner remedio lo antes posible.

Juan Vázquez

Médico veterinario